Jornaleros presos piden que les apliquen fianza para recuperar libertad

Por
Lorena Lamas

Ensenada, 15 de abril.- De los 14 jornaleros agrícolas que siguen detenidos en el Centro de Reinserción Social (Cereso) de Ensenada, por la revuelta que se presentó el lunes 17 de marzo en San Quintín, tres fueron encarcelados por comprar artículos robados informó el subprocurador de Derechos Humanos, Heriberto López López.

Durante la manifestación que organizó la Alianza de Organizaciones Nacional, Estatal y Municipal por la Justicia Social para reclamar mejores condiciones de vida y laborales se registraron diversos actos de vandalismo ajenos al movimiento, aseguraron los cinco dirigentes del organismo popular.

No obstante, los reportes de la Dirección de Seguridad Pública Municipal (DSPM) refieren que personas que se hicieron pasar por jornaleros indígenas, robaron despensas en tiendas de autoservicio, entre estas "El Reloj", en Camalú, que resultó la más afectada, además de negocios de ropa en San Quintín.

Los atracos se cometieron durante el paso de las marchas en las que participaron miles de jornaleros; algunas personas comenzaron por romper cristales, quitar candados y por último sacaron mercancías, como lo constató La Jornada Baja California el mismo día de los incidentes. Por las calles se pudo ver personas cargando todo tipo de mercancías, desde alimentos hasta artículos para el hogar y bebidas alcohólicas.

Ese día por seguridad todos los comercios del lugar cerraron sus puertas y al pasar las horas hubo escasez de productos básicos, agua y combustible, por lo que algunas personas compraron productos en la vía pública.

Horas después las corporaciones policiacas detuvieron a más de 200 personas por los desmanes, pero fueron quedando en libertad salvo los 14 que permanecen recluidos en la Penitenciaría de Ensenada.

En la visita que realizó al penal López López junto con el procurador de los Derechos Humanos Arnulfo de León Lavenant, los reclusos -algunos de origen oaxaqueño- pidieron la intervención de la Defensoría de Oficio para que se les fije una fianza y puedan ser absueltos ya que los productos se los vendieron en la vía pública.

"Ellos hicieron petición del ofrecimiento de testigos en el sentido de que ellos manifiestan que no robaron y compraron la mercancía; piden que como PDH intervengamos porque si fue así pueden ejercer el derecho de salir bajo fianza", detalló el subprocurador.

Sobre el estado de salud de los presos dijo que todos fueron valorados y no manifestaron ningún malestar, excepto un jornalero que tiene una quemadura en un brazo debido al contacto con un químico durante el traslado y que le provocó una escoriación.

La intención de la visita, explicó, fue revisar la situación jurídica de los detenidos y establecer la estrategia que se tomará para ver la manera de que salgan lo más pronto posible en función del motivo por el que están siendo procesados, tras casi un mes de estar arrestados.

Otro problema que se registró con uno de los detenidos, dijo, es que lo timaron cuando familiares de Estados Unidos le mandaron dinero a través de "conocidos" quienes no le entregaron el efectivo.

Para agilizar el proceso, la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI) coadyuva con Defensoría de Oficio, quienes se encuentran en la integración del expediente.