(boletín de prensa leído el día de hoy en conferencia de prensa, por parte de la esposa de nuestro compañero Efrain Espinoza Pérez, victima de ataque paramilitar realizado por la Alianza San Bartolomé de Los Llanos el 4 de mayo del presente año en Venustiano Carranza)

San Cristóbal de las Casas, Chiapas. 11 de octubre de 2021

A los medios de comunicación
A los familiares de las víctimas de la violencia de Estado
Al pueblo en general

Mi nombre es Martha Guadalupe Vázquez Ramírez, soy esposa y compañera de lucha de Efraín Espinoza Pérez, quien fue asesinado por motivos políticos el día 4 de mayo de este año, este crimen fue mandatado por el gobierno de Rutilio Escandón Cadenas y perpetrado por el grupo paramilitar Alianza San Bartolomé de Los Llanos, van cinco meses de este crimen y los responsables siguen sin ser castigados, por esa razón, hoy estoy aquí para dejar en claro que voy a seguir en la lucha por justicia.

En el Municipio de Venustiano Carranza donde vivo con mis hijos, y vivía con mi esposo, el gobierno desde hace años ha buscado quitarles las tierras a los campesinos, pero como no se dejan y defienden sus tierras, el gobierno implementa la represión, la violencia para quitárselas a la fuerza, por eso, ha habido muchos campesinos muertos, encarcelados y desaparecidos.

El compa Efraín participó en la defensa de la tierra en esa región de la entidad, participó de también en actividades de la organización para exigir justicia, presentación con vida de los detenidos desaparecidos, repartió volantes donde se decía que en Carranza hay paramilitarismo, que son controlados por el Estado y que esos grupos tienen el objetivo de asesinar a campesinos.

Así como lo decía así ocurrió en Carranza, la Alianza San Bartolomé de los Llanos es un grupo paramilitar que sirve al gobierno, y que se encarga de asesinar a campesinos para quitarles sus tierras, también el cacique Jesús Alejo Orantes tiene sus grupos de pistoleros para no dejar que los campesinos se organicen, todos ellos, son los culpables de la violencia en el municipio donde vivo.

El 4 de mayo la Alianza San Bartolomé llevó a cabo un ataque con armas de uso exclusivo del ejército en contra de campesinos que luchan y defienden el derecho a la tierra, en ese ataque cae asesinado mi esposo, quien estaba en el lugar de los hechos solidarizándose en esa lucha, recibió un impacto de bala del lado derecho de la cabeza, en ese mismo ataque paramilitar fue asesinado también el compañero Mario Alberto Vázquez…

Los paramilitares de la Alianza San Bartolomé, el día que asesinaron a mi esposo actuaron conjuntamente con la Guardia Nacional, por eso tenían muchas armas y muchas balas, ninguna comunidad campesina que se dedique al campo puede adquirir todo eso, solamente el gobierno se las puede dar.

Hay una denuncia formal por este crimen, sin embargo, las autoridades nada hacen para castigar a los asesinos, al contrario, los protegen e incluso llegaron militares y Guardia Nacional para cuidar a los paramilitares.

Sé que, así como mi esposo hay otros luchadores sociales en el país que fueron víctimas de la represión, yo les digo a sus familiares que no queden callados ante esas injusticias, debemos todos y todas exigir justicia, no podemos dejar esos crímenes en el olvido, hay que conjuntar nuestras voces para que los responsables materiales e intelectuales sean castigados.

El Estado me arrebato a mi esposo, dejó a tres menores de edad sin padre, es una situación indignante, que me hace venir aquí e ir donde se requiera para exigir justicia, para que su nombre no sea olvidado y sea recordado como lo que fue: un luchador social, un hombre de trabajo y de lucha.

Llevamos a cabo una jornada de lucha por justicia, verdad y libertad y una de nuestras demandas es el juicio y castigo a los responsables materiales e intelectuales de los crímenes de Estado, así como la desarticulación de los grupos paramilitares, ente contexto exijo justicia para mi esposo.

El gobierno federal por no hacer nada, por no desarticulara los paramilitares y por militarizar el país también es responsable de lo que le ocurrió a mi esposo y a los demás campesinos asesinados.

El compa Efraín enseño a su familia a luchar, por eso estamos aquí. Mientras no haya justicia no habrá silencio, no habrá desistimiento, por el contrario, gritaremos más fuerte ¡JUSTICIA!

Foto: conferencia de prensa, (en medio la esposa de Efraín)